“Háblame de ti” es esa película que sentí que me hubiera gustado ver cuando tenía 17. Cuando escribí el guión jamás pensé que se convertiría en mi ópera prima, pero así es la vida, me tocó filmar una película basada en anécdotas personales que poco a poco fueron cobrando vida propia y así es como existe Chava, un personaje que recorre un camino de autodescubrimiento y que se enfrenta no solo a conocer los secretos de su familia sino a aceptarse como un chico homosexual y ¡vaya aventura! El mensaje está claro: nunca va a estar mal ser quién eres, puede ser difícil y doloroso, pero así es la vida y de eso se trata crecer. 

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A todos los chicos, chicas y chiques que miren esta película ojalá les sirva como un parteaguas en sus vidas para que se sientan con valentía de enfrentar lo que son, independientemente si se trata de preferencia sexual, carrera profesional, religión, no importa el proceso que estés viviendo. Hay que entender que nuestros lazos de amistad y de familia pueden llegar a ser imperfectos pero todos somos seres humanos y son esos lazos los que al final nos podrán ayudar a salir adelante.

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Háblame de ti, es ese relato contado desde las entrañas, desde el corazón de un equipo de gente que cree en estas historias.